El objetivo del observatorio será monitorear, recopilar y socializar la información de los impactos positivos y negativos del Tren Maya para enriquecer la toma de decisiones que permitan un mejor proceso de planeación.
13 de noviembre, 2020.
El Observatorio de Prosperidad Regional tendrá la función de monitorear y evaluar los impactos positivos y negativos del Tren Maya, a partir del proceso de planeación del proyecto de Desarrollo Integral Territorial y Urbano de la Región Sureste de México. Con este fin, el observatorio compilará información de distintos indicadores, cuyo análisis permitirá conocer el impacto del proyecto en la región para tomar decisiones que permitan mejorar el proceso de planeación.
En palabras del director interino de ONU-Habitat para México y Cuba, Eduardo López Moreno, “en la actualidad, existe una falta de información en el territorio que puede ser alimentada con desinformación. Por ello, el Observatorio de Prosperidad Regional del Sureste de México pretende recopilar y socializar información sobre los impactos positivos y negativos del tren, para que los habitantes de la región tengan acceso a estos datos”.
A partir de indicadores estratégicos, se quiere contar con información que contribuya para una mejor gestión y planificación de los asentamientos humanos, así como marcar las pautas que se deberán seguir en el territorio para propiciar un desarrollo en las condiciones y calidad de vida de todas las personas.
“Un proyecto de infraestructura como el Tren Maya requiere de instrumentos de monitoreo y evaluación que permitan dar cuenta del impacto del desarrollo del programa para cambiar políticas o actividades que no estén dando los resultados esperados o bien para corregir efectos indeseados”, añade López Moreno.
Proceso de constitución
Para la constitución del observatorio, ONU-Habitat ha analizado las condiciones en el Sureste antes de la construcción del Tren Maya a partir de 30 indicadores clasificados en las dimensiones económica, turística, social, cultural, ambiental y urbano-territorial. El monitoreo de estas dimensiones durante el desarrollo e implementación del proyecto permitirá conocer su impacto y brindar información oportuna a la población.
Previo a su conformación, ONU-Habitat está realizando entrevistas con actores locales del Sureste para, entre otras cuestiones:
- Identificar, desde cada ámbito de conocimiento, cuáles son los impactos relevantes que el observatorio debe monitorear.
- Construir de manera conjunta y coordinada el modelo de observatorio que se requiere para medir esos impactos del proyecto.
- Conocer las diversas iniciativas de monitoreo que ya se están desarrollando en la región.
Se espera que el observatorio integre la experiencia y la visión de ONU-Habitat, junto con la perspectiva regional y local, a través de información y mecanismos de monitoreo que permitan tomar en cuenta las inquietudes de la población para que estas sean parte del proyecto de desarrollo integral, territorial y urbano de la región.
En este sentido, para la conformación del mecanismo operacional del observatorio, se contempla conocer e integrar las iniciativas locales de la academia, instituciones gubernamentales, sociedad civil organizada y no organizada de los cincos estados del sureste mexicano por los que circulará el Tren Maya, con el fin de generar a través de un proceso participativo un mecanismo de vigilancia y monitoreo.
Asimismo, ONU Habitat está analizando estrategias de financiamiento que aseguren su continuidad en el tiempo, en un marco de calidad técnica de contenidos e independencia institucional.
El Observatorio de Prosperidad Regional del Sureste de México forma parte de las actividades del convenio de colaboración con Fonatur para prestar apoyo sustantivo y técnico en el marco del proyecto del Tren Maya.